miércoles, 16 de febrero de 2011

No sé que dolió mas.

Sí irme con el, o que tu no me lo impidieras.

Estábamos todos en aquella vieja habitación, los chicos en el sofá, durmiendo apretujados, Miguel y su novia de entonces en el cuarto de al lado, y nosotros en el suelo con unas mantas como cama y nuestros cuerpos como sábanas.
Nuestras manos se agarraron y nos miramos largo y tendido. No dijimos nada. No hacia falta.Tus ojos eran serios, pero mas cercanos que nunca.
Alguien abrió la puerta. Era él, venía a por mi, me alegré.
- Cariño, vamos a mi cama - dijo con voz tierna.
Me levante, y al hacerlo nuestras manos(y corazones)se separaron.
Manuel estaba de espaldas, pero yo te mire, y tu, con la mas triste mirada de pena, te despediste.

Angie.

No hay comentarios:

Publicar un comentario